Herrero de profesión, con más de 15 años de experiencia en el sector.
 

A lo largo de estos años he aprendido que el trabajo bien hecho no solo requiere técnica, sino también pasión. Para mí, la herrería no es solo un oficio, es una forma de vida. Disfruto cada proyecto, desde lo más simple hasta lo más complejo, cuidando cada detalle con dedicación y orgullo.

El origen de nuestra empresa se remonta al pueblo de Algimia de Alfara, donde comenzamos con ilusión y muchas ganas de trabajar. Poco a poco, gracias a la confianza de nuestros clientes y al esfuerzo constante, fuimos creciendo y abordando proyectos cada vez más grandes y variados.

Hoy en día, nos encontramos en el polígono de Soneja, donde nos hemos trasladado para poder hacer frente a la creciente carga de trabajo. Nuestro antiguo taller se nos quedó pequeño, y este cambio nos permite seguir ofreciendo la calidad, profesionalidad y compromiso que siempre nos ha caracterizado.

Cada pieza que sale de nuestro taller refleja no solo nuestra experiencia, sino también el amor y el respeto por este noble oficio.